Los tsunamis pueden tener cualquier tamaño. Puede ser que sólo los registremos en los mareógrafos o que alcancen varios metros de altura. Pero no necesariamente son una ola, pueden ser un aumento gradual del nivel del mar, es decir como si la marea subiera muy rápido y de forma constante metiéndose a tierra. También pueden ser una serie de olas, y muchas veces la primera ola no es la más grande.